03-30-2006
No es que me importe, pero por lo visto ayer jugaba el Club Deportivo Saprissa (¿o tal vez ahora se llama Saprissa Sócer Esporsh Clú?) algún partido y perdió.
El primer indicio del hecho fue la impasable tristeza en la cara de una niña en la mañana. Esto se respeta.
Creo que La Nación puso en su trasero (¡gracias mil al que tuvo esa magnífica idea!) algo al respecto. Eso se ignora.
Lo que no se respeta ni se puede ignorar es que ahora haciendo zápin radiofónico al medio día es que de ocho emisoras en la lista de “oíbles” (del diccionario “Mundo-Marcelo, Marcelo-Mundo” se extrae: oíble: a. no ponen ni los tigres del norte ni la gasolina en ningún momento del día, o al menos si lo hacen no me he dado cuenta aún) cinco estaban discutiendo “el mal arbitraje” (del diccionario “fanático-realidad, realidad-fanático” eso quiere decir “las once perras juegan menos que una lombriz con una madeja de lana, así que hay que buscar a quién echarle la culpa”) y en concreto estaban divirgiendo respecto a las “diesciete simples reglas” según alguna de las cuales “si se mueve, va jalando” que un “línea” de nacionalidad costarricense en una a todas luces evidente maniobra para “robarnos el partido” no estoy seguro si anuló un gol del equipo Saprissa o si por el contrario “se quedó más sentado que fresco’e balines” y dejó pasar un “fuera de juego” que terminó en gol contra el susodicho equipo.
Alguna de las perras que patean la bola aparentemente estaba molesto por esto y declaró que “si los árbitros siguen en esa vara de robarnos los partidos, hacerse los majes con los fueras de juego y los penales, y andar persiguiendo al Equipo” — se dejó escuchar la letra mayúscula — “en todos los campeonatos” … ¿nos va dejar en paz y retirarse del escenario nacional? No, no exactamente… “don No Sé Qué se las va a ver conmigo.” Estoy seguro que tal afirmación vende más periódicos y más tele que “convocatoria nacional para reforma educativa” así que me quedé con las ganas de escucharlo decir que “va jalando.”
Algún día…