12-03-2012
Hace poco el ICE publicó sus nuevos planes para telefonía celular. Superficialmente se ven muy atractivos, pero una vez que uno se fija con más cuidado, ¡el ICE nos quiere meter diez con hueco!
Si uno se fija en los planes que incluyen el paquete de conectividad a Internet (no todos lo incluyen), notará por ejemplo que uno puede obtener por ¢6500 una conexión de 1 Mb/s a cambio de incluir pocos minutos de voz en el plan. ¡Casi me voy de jupa! Con el plan que tengo actualmente es muy raro el mes en que uso más que los minutos incluidos. De hecho estaba haciendo el trámite cuando revisando las opciones noté que decía que el plan de datos tenía un límite de 600 MB por mes y hasta ahí llegó el amor. En un día normal mi teléfono descarga de la red entre 200 y 400 MB de datos. En un día. ¡Los 600 MB me los como en tres días! ¿Y qué hago despúes?
Esa es, aparentemente, la pregunta de los ¢6500. El ICE omite olímpicamente el detalle del límite de descargas en la publicidad. En la página web donde describe los planes el límite tampoco está mencionado. No es sino hasta que uno solicita el plan que, escondido en el medio de una montaña de otras cosas, indica que el límite existe. Y no indica que sucede si uno alcanza o supera ese límite.
Más incómodo aún es el hecho que pareciera que los planes ilimitados ya no existen. En la agencia virtual resulta imposible consultar cuál servicio de datos tengo actualmente, mucho menos cambiarlo. Hasta hace no mucho tiempo era posible hacer ambas cosas (para el caso, resulta imposible consultar cuáles son los servicios suscritos para la línea).
Vamos ICE, yo sé que este es uno de los beneficios que nos trae la apertura, pero ¡ustedes siempre han hecho las cosas mejor que eso!